domingo, 6 de noviembre de 2016

El Reino Tonto

Han pasado más de seis meses sin escribir en este blog. Pero ¡qué meses son! Primero sufríamos un diluvio de mentiras sobre la cuestión de quedarnos miembro de la UE o no. Los que estaban a favor de quedarse nos aseguran de que si la decisión fuera abandonar, en seguida terminaría el mundo, mientras que los lideres de la campaña para Brexit ( ¿ que palabra fea este neologismo, no?) hablaban de la llegada de una época dorada - millones de libras esterlinas para invertir en el servicio de salud, los colegios e institutos, libertad de los grillos de Bruselas y más importante de todo, una expulsión de extranjeros igual a la de la Reconquista española. Y las voces más clamorosas eran las de la prensa derechista, especialmente desde el imperio de Rupert Murdoch - un australiano ( = extranjero) que visita el Reino Unido solamente cuando sea necesario para lucrarse.
Los sondeos pronosticaran un voto a favor de quedarnos. Eran erroneados. En palabras del dicho inglés, los pavos sí habían votado a favor de la Navidad.
¿Y los meses a partir del referéndum? El caos. David Cameron tenía que renunciar su puesto. Los lideres del Brexit peleaban entre sí para ser su heredero mientras la señora Theresa May esperaba sin decir nada; una estrategia sabia, porqué ya es la nueva inquilina de la famosa Numero 10.
Sabia para ella quizás, pero no para el país en mi opinión. Es evidente que no había planteado nada. Durante sus primeras semanas solamente repetía la mantra "Brexit significa Brexit" que es la manera política de decir " No sé". Más recientemente ha cambiado la mantra pero no lo que significa. Ahora dice "no voy a divulgar nuestra estrategia para no dar ventaja a Bruselas"
Pero lo que los para Brexit prefieren olvidar es que la diferencia en votos entre las 'abandonar' y las 'quedar' no alcanzó a dos por ciento. La opinión nacional efectivamente se dividó por la mitad.
¿Qué ahora? Una cuestión que carece de respuesta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario